domingo, 31 de mayo de 2009

RACISMO Y XENOFOBIA EN EL DEPORTE ESPAÑOL

En la sensibilización ciudadana, directamente a través de los medios o a través de actos de atención a las víctimas. El de la violencia ultrarracista del fútbol y, en segundo lugar, de la integración de los inmigrantes en el deporte. Se ha de trabaja para la no discriminacion, el informe Raxen, en el que hay mucha información, mucha documentación y muchas imágenes del mundo de Internet. Por tanto, podemos ver el vídeo del reportaje de Informe Semanal sobre la muerte de Aitor Zabaleta seguidor de la Real Sociedad asesinado a manos de un seguidor descerebrado por pertenecer a otro club; grupos ultras, neonazis, racistas, que protagonizan la violencia y el racismo en el ámbito del fútbol.
El 7 de febrero de 1987 la Policía interviene una acción de 400 skinhead en las ramblas de Barcelona vinculados al Español. En 1990 un informe del comisario Alberto Elías, del Servicio de Información de la Policía, denunciaba la existencia de un movimiento xenófobo en el ámbito del fútbol, y alertaba de que al rechazo al sistema democrático y a su incontinencia verbal se unía su voluntad de atacar a inmigrantes, homosexuales y otros colectivos sociales. Estos colectivos no sólo dicen lo que hacen y se vanaglorian, sino que hacen lo que dicen y lo llevan a la práctica.
En 1992 la primera encuesta policial sobre hinchadas ultras confirmaba la existencia de grupos ultras en nueve de los 38 estadios de primera división. Hoy el problema no está en nueve, hoy está prácticamente en todos los estadios de primera, en todos los estadios de segunda, en todos los estadios de segunda B, en todos los estadios de tercera división, y los hemos detectado en campos de fútbol de juveniles y de fútbol sala. Durante todos estos años hemos conocido sucesos innumerables de violencia y de racismo, quizá no tan duros como la muerte de Aitor Zabaleta, aunque también hay que mencionar el asesinato en 1991 de Frederick Rouquier, un seguidor del Español a manos de los «Boixos nois», o de Manuel Ríos en Santiago de Compostela. Enfrentamientos entre grupos, agresiones a aficionados, a viandantes, a vigilantes de seguridad, a fuerzas de seguridad, a presidentes de clubes --como el de Valencia por parte de Ultrasur, por ejemplo--, agresiones y amenazas racistas, a Wilfred portero del Rayo, a Tren Valencia del propio equipo del Atlético de Madrid, al que los ultras fueron a pegarle porque no rendía; a Fede Rincón, al propio Valdano, hoy son EtoÆo y Cameni. Pero ésos son los de hoy, hace unos años eran estos otros; y aparte de estos crímenes hay otros fuera del ámbito del fútbol.
En 1994 la delegada del Gobierno de Madrid en aquella época, Pilar Lledó, hizo público que en la Comunidad de Madrid se gastaba más de 1.000 millones de pesetas anuales en seguridad por el problema de los ultras.La penetración de las organizaciones neonazis en los grupos ultras se ha revelado por parte de la Guardia Civil. Recientemente hubo una operación importante contra los Hammerskin, que es una red de alcance internacional que tiene bases en Estados Unidos, en Gran Bretaña y en distintos países, muchos de ellos pertenecientes al grupo de Ultrasur. Sin embargo, a pesar de que eso se ha denunciado, de que ha habido muchos sucesos, e incluso detenciones, el problema persiste y aumenta en los distintos niveles deportivos, como antes he dicho. Eso también se puede observar en Internet, por ejemplo, en el mundo de la música racista, donde se anuncian acciones ultras en paralelo. Por ejemplo, sé que este fin de semana, con motivo del partido Madrid-Barcelona, se va celebrar un concierto clandestino de música racista. No se va a anunciar en los medios convencionales.
El protocolo, en su introducción, dice lo siguiente: Conscientes del papel que desempeña el deporte en nuestra sociedad, de su función de integración social e intercultural, de educación y contribución a la salud pública, así como de los valores que emanan del mismo, como son el respeto mutuo, la tolerancia, la deportividad y la no discriminación...Eso es lo que dice en el primer párrafo. Bien, pues, nos encontramos con que hay normas federativas que impiden la igualdad de trato de los inmigrantes en el ámbito futbolístico.

Si dejamos el fútbol por un momento y analizamos lo que sucede en la sociedad española veremos que en las escuelas de las grandes urbes hay una altísima presencia de niños de la diversidad que se educan junto a sus hijos, señorías, tanto en la escuela pública como en la privada. Y las aulas de compensación o de ambientación se transforman en áreas en las que los niños de la diversidad son expuestos diariamente a diferentes tipos de acoso y opresión, de violencia, lo que nos debe llevar a preguntarnos lo que está sucediendo hoy en el sistema educativo.Precisamente Cecra ha realizado un trabajo sobre el mundo educativo, e incluso nuestros colaboradores están haciendo un estrecho seguimiento de lo que sucede, por ejemplo, con esas bandas urbanas conocidas como los «latin kings» o los «ñetas». Muchos de nuestros hijos incluso han sufrido esa realidad. Cuando los niños de la diversidad, nuestros hijos: negros, sudamericanos, o asiáticos, llegan a esas aulas son introducidos de inmediato en un círculo de violencia en el que la palabra «racismo» es el valor de integración. Porque todos esos niños que hoy van a esas escuelas se sienten discriminados de una manera concreta; y puedo darles datos sobre nuestra experiencia. Esos clubes, con personas que no ven ni sienten la diversidad, poco pueden hacer para articular políticas frente a los grupos ultras. Esas personas, que no tienen competencia cultural de la diversidad, no pueden desarrollar las actividades que la sociedad de la diversidad requiere. Por supuesto, actúan sin darse cuenta de que estos grupos ultras son una forma de construcción de la exclusión en el fútbol también.
las peñas, o la estructura de los aficionados, las que están registradas y son legales en el contexto de los clubes y del fútbol profesional, encontraréis también una ausencia total de diversidad.Por otra parte, la industria del fútbol, que tiene claras limitaciones para afrontar la realidad de la diversidad de la sociedad actual, también está rodeada por otra industria: anunciantes e instituciones que fabrican o distribuyen productos para el fútbol. Y la sensación de falta de entendimiento de cómo debe comportarse el fútbol frente a estos problemas es la misma. Hablando claramente de los problemas que hacen que el fútbol sea una industria de la diversidad, debo decir que hace cinco años el fútbol español tenía una presencia mayor de la diversidad en sus gradas.Hoy las poblaciones de la diversidad se están alejando del fútbol poco a poco. A pesar de que crece en la sociedad el número de personas de la diversidad y que les gusta el fútbol, éstas se están alejando del fútbol profesional, y se está construyendo una enorme cantidad de ligas étnicas en numerosos ámbitos de la sociedad española. Estas ligas étnicas son la respuesta a la carencia de políticas de promoción de la igualdad de trato en las instituciones.
El problema del racismo en esta sociedad se resuelve localizando desde dónde se producen las políticas que hacen una construcción racial.